Mijaíl Ulibin - Ilyá Gurévich

Santiago (Chile), 1990

Juegan las blancas

Incluso en posiciones relativamente simples, sin desequilibrios materiales extraños, un jugador experto puede cometer terribles errores de evaluación. Esto es particularmente frecuente en las transiciones hacia el final de la partida.

Evaluemos la posición. En primer lugar, hay igualdad material. Segundo, los dos bandos tienen peones pasados, pero el del blanco está un poco más avanzado. La torre y el caballo blancos son algo más activos que las piezas negras, pero el rey negro está mejor situado.

Punto de partida: poco claro. Normalmente, la etiqueta “poco claro” no es un problema. Más tarde algún comentarista puede decidir actualizar la evaluación y cambiar el signo de igualdad en la jugada 12^a por el de ligera ventaja para las blancas en la jugada 20^a. Pero los jugadores no necesitan hacer esto en el transcurso de la partida.

Sin embargo, en esta situación evaluar es importante porque las blancas pueden forzar unas sencillas tablas, si así lo desean: 1 Cd4+ Re5 2 Cf3+. Las negras no pueden evitar que se repitan posiciones sin meterse en problemas; v.g., 2 ... Re6 3 Cd4+ Rd7 4 Cb3 Tf8 5 Cd4.

Cuando tenemos la oportunidad de forzar la situación para conseguir un resultado concreto, una victoria o unas tablas, tenemos que analizar la opción alternativa con mucha precaución. No obstante: