Cambiar piezas es el recurso defensivo más evidente y conocido. Con menos piezas sobre el tablero –y, sobre todo, con menos peones– se alivia la tarea del defensor, porque se atenúa la presión en sus debilidades.
Con un cambio forzado pueden erradicarse a menudo todos los peligros de la posición.
Si las negras dispusieran de tiempo, con ...Ac8-g4 ó h3 podrían contrarrestar las ventajas de la posición de las blancas, crearían amenazas tácticas que habría que atender con sumo cuidado.