MARŻO
1976-2012
Este 24 de marżo se cumplen 36 ańos del inicio de la ultima dictadura civico militar. La misma se produjo cuando un grupo perteneciente a las fuerzas armadas y eon apoyo de las grandes corporaciones económicas del pais y el extranjero (Monopolios mediaticos, Sociedad Rural, FMI, etc.), tomó por la fuerza el poder del estado desplazando asi a las autoridades legitimamente constituidas.
El objetivo no fue solamente, como ellos intentaban hacer creer a la sociedad civil (y buena parte de la misma les fue complaciente) hacer que vuelva el orden en el pais.
Se trataba de algo mucho mas macabro: disciplinar a la masa trabajadora y principalmente a los jóvenes para que no sean estorbo antę los planes económicos que sus aliados politicos e ideológicos intentaban implantar en la nación. Por eso los 30.000 compańeros desaparecidos, por eso la tortura, las muertes, el exilio y los robos de bebes. Solo eon el pueblo, mayormente peronista, dominado, aterrorizado, perseguido o forzado al exilio, la oligarquia y el Capital financiero tendrian piedra librę para llevar adelante los planes económicos que nos rigieron hasta el 2003.
No solamente es bestial el tomar el poder por la fuerza y despreciar la voluntad popular, el perseguir y aniquilar a decenas de miles de compańeros que luchaban por un mundo mas igualitario y por la patria librę, justa y soberana. Tambien fue criminal el modelo de exclusión, hambre y saqueo del pais que se implantó y que nos llevó al
abismo alla en el 2001.
Hoy el gobierno electo por la mayoria del pueblo argentino se encarga de que se imparta justicia sobre estos asesinos. Nada de revanchismos, justicia como dicta la constitución (esa misma que ellos usaron de apoya vasos de sus whiskys importados) y se acabó la impunidad.
Mientras tanto, los sueńos de estos miles de luchadores y militantes se van concretando de a poco. No se los reeuerda como pobres inocentes a los que unos hombres malos mataron por pensar distinto. Se los tiene bien presente como hombres y mujeres que dieron la vida para que nosotros, nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos vivamos mejor. El unico homenaje que se les puede hacer a ellos, y a tantos otros que ya habian regado nuestro suelo eon sangre en nombre de las causas mas justas, es tomar la bandera de sus manos y llevarla hacia la victoria.